El presente de este encuentro se trazó en el mar,
donde el cuerpo no se oculta y flota la verdad.
Apareces en mi sol como un nuevo amor,
y atrapas mi persona con
tu voz,
tu voz,
tu voz, veneno de lujuria.
Hoy parece que en el cielo se barajan mis
sentimientos, y han puesto en el rumbo de mi amor
la trampa del corazón.
Se han tejido los tendones que sustentan las
relaciones, y han puesto un demonio de pasión
rondando mi corazón.
Como el ojo del ladrón que mira sin mirar,
te robaste todo el oro que hubo por robar.
En cabeza de mujer no hay seguridad,
y el hombre se hace dueño por
la piel,
la piel,
la piel, alfombra de lujuria.
Hoy parece que en el cielo se barajan mis
sentimientos, y han puesto en el rumbo de mi amor
la trampa del corazón.
Se han tejido los tendones que sustentan las
relaciones, y han puesto un demonio de pasión
rondando mi corazón.