ESPACIO CURRICULAR IMÁGENES Y CONTEXTOS

Fundamentación
El concepto de cultura comprende una totalidad en el sentido de que cada individuo se prolonga en sus costumbres, en sus instituciones, en sus utensilios. Las estrategias que esgrimen el hombre y los pueblos para vivir son signos de su cultura: lo ritual, lo mágico, las costumbres, la ciencia, la tecnología, las producciones, el arte.

El concepto de signo es muy antiguo y alude a algo que es percibido (colores, olores, formas, sonidos, sensaciones, etc) y a lo que se le confiere una significación. El signo designa o significa una cosa, ausente, concreta o abstracta. Su interpretación depende de la propia cultura, o sea de la cultura de quien lo significa. Significante, referente y significado tienen entidad en la medida en que un sujeto cultural les da sentido.

El lenguaje es un recurso comunicacional con el que cuenta el hombre, que ha evolucionado de una forma primaria y pura hasta la alfabetidad (la lectura y la escritura). Los componentes básicos de ese lenguaje son principios de la lectura y la escritura y su combinación provee distintas soluciones creativas para los problemas de la comunicación. Son códigos que ha creado el hombre para entenderse, para expresarse, para relacionarse, para identificarse. La particularidad en el uso de estos recursos le ayuda a encontrar un estilo propio.

Así como tenemos códigos para entendernos con la palabra también tenemos códigos para comunicar con imágenes. Nos circundan imágenes visuales, sonoras, evocadas, sensibles. Para comprenderse en el plano de las imágenes es necesaria la interpretación. Si no se interpreta no se comprende, y dicha comprensión debe ser a la vez sensible.

Partir de la idea de que la imagen es representación implica utilizar reglas de construcción donde hay alguien que la produce y alguien que la reconoce porque existe una mínima convención sociocultural. Asumiendo que cultura supone un suelo en el que inevitablemente se habita, habitar un lugar quiere decir que no se puede ser indiferente frente a lo que ahí ocurre. Esto significa que no hay objetos separados: hay imágenes en contextos ya que la imagen se instala en el mundo, en el suelo, en el hábitat, en la cultura.

Esta interpretación de imágenes y contextos presupone lenguajes, códigos discursivos y no discursivos, con un productor y un receptor, donde se combinará lo sintáctico, lo semántico y lo pragmático en esta interpretación, en este universo de comprender sintiendo y de sentir comprendiendo. El proceso interpretativo se da en un marco atravesado por las raíces, la historia del hombre, quien debe entender que construye la propia (lo que emerge) a partir de descifrar códigos anteriores (lo que subyace). En esta construcción confluyen el autor o productor, la obra o producción y un pueblo que la absorbe produciéndose un fenómeno cultural donde no vale ni el autor ni la obra sin una sociedad que la incorpora y le da sentido.
Lo económico, lo tecnológico, lo político, lo ético, definen o perfilan un modelo cultural. Para poder administrar este modelo cultural debemos institucionalizarlo desde el lugar que nos compete: la enseñanza. Para dotar a lo que se enseña de un sentido social que aporte a la formación de ciudadanos no es posible iniciar ningún razonamiento respecto a la sociedad empezando por el individuo porque el ser humano es social desde que llega al mundo. Los miembros de una democracia no son individuos sino ciudadanos. La ciudadanía se construye y para que haya ciudadanos tiene que haber derechos civiles que puedan ser ejercidos, derechos políticos, económicos, sociales, culturales con plena vigencia. Si no, no hay ciudadanía y por lo tanto no hay democracia ni libertad, por lo menos para una importante franja de la población. Es necesario que el Estado proteja y regule las libertades y los derechos sosteniendo que lo colectivo no anula lo individual.

En el mundo contemporáneo, donde el mercado propone a los adolescentes modelos constitutivos de la identidad, construir una alternativa es enseñar a interpretar los contextos donde los ciudadanos tengan la posibilidad de encontrar imágenes comunes que los identifiquen en cuestiones comunes. Enseñar a sintetizar la imagen del ideario colectivo es proponer la creación de espacios donde el hombre se ubique libremente y elija de acuerdo al contexto donde se sienta representado en sus intereses como individuo social.

Objetivos

" Interpretar el sentido de las imágenes como producciones culturales que responden a cosmovisiones histórica y culturalmente situadas.
" Comprender los aspectos semióticos implicados en el discurso de la imagen vinculándolos con los contextos histórico - sociales.
" Analizar y contextualizar los roles del productor, la obra y el público como categorías dinámicas.
" Operar con recursos para elaborar imágenes comprendiendo el proceso interpretativo - formativo de la producción artística.

Contenidos de la enseñanza

La comunicación es posible cuando se comparten los códigos de un lenguaje. Para empezar a definir lo que es la imagen y lo que se puede hacer con ella es preciso entender que en las imágenes existen códigos de comunicación articulados en un lenguaje. La capacidad de interpretar los sentidos de las imágenes se construye en el proceso de enseñanza - aprendizaje, vinculando los aspectos sintácticos (propios de la imagen en sí) contextuales (el lugar, la época) y del sujeto (experiencias, pertenencia cultural).

En un plano analítico, y a fin de organizar los contenidos de la enseñanza, es posible mirar por separado como objetos de estudio la imagen y los contextos, pero es insoslayable su síntesis y su resignificación en el marco de la cultura, atendiendo a las producciones culturales en general y artísticas en particular.

A la vez los contenidos deben ser leídos e interpretados a partir de una reflexión acerca de diferentes aspectos que inciden en el perfil del alumno. Se piensa en un joven que salga al mundo con sus propios medios, interpretador de realidades, discursos, señales, mensajes. Un joven pensante, reflexivo, crítico, observador, criterioso, dúctil, vinculado a una determinada comunidad a la que pertenece, con tiempos y necesidades particulares.

La imagen - Los contextos
Se abordan los elementos constitutivos, fundamentos sintácticos y estructurales de las imágenes, haciendo centro en "el objeto", la imagen en sí, enfocando en el concepto de imagen y los marcos en los que la imagen ocurre como producto y como mensaje a ser interpretado. Se construyen herramientas para interpretar las relaciones que ligan a las imágenes y sus contextos sobre la base de que las imágenes y quienes las producen adquieren sentido cuando la comunidad las absorbe y se las apropia, resignificándolas y transformándolas en fenómeno cultural.

Concepto de imagen. La imagen vista desde distintas disciplinas artísticas (el teatro, el videoclip, la fotografía, la música, el diseño, la pintura, etc) considerando el concepto de lenguajes verbales y no verbales. Referencias a la teoría semiótica en relación con la imagen. La imagen como signo. Intencionalidad de la imagen según los momentos históricos. Usos y significados. Tipos de imágenes. Funciones: artística, comunicativa, simbólica, etc.

Concepto de contexto. Relaciones entre lo social, cultural, histórico, geográfico, político y económico. Cambios y transformaciones en el contexto y el desarrollo de la imagen. Relaciones entre contexto y poder.
Relaciones que ligan a las imágenes y sus contextos. Criterios de verosimilitud que se establecen entre imagen, contexto e información. Transformaciones que se han ido sucediendo en diferentes épocas históricas.

Características de los productores/ hacedores y los espectadores/ receptores de imágenes en diferentes contextos y épocas.

La imagen y la contemporaneidad
Considerando que la contemporaneidad ha sido definida como "la civilización de la imagen" es fundamental que los adolescentes puedan interpretar el mundo en el que viven transitando los mensajes de sus imágenes en forma activa, crítica y creativa.

Los medios y la masividad de la imagen. El mercado de la imagen. Consumo de imágenes. La imagen y el poder. La globalización, la tecnología y la identidad. Alcance social de la imagen. Nuevos lenguajes. Multiplicación, reproducción de imágenes. La imagen en la industria cultural. Revolución industrial, vanguardias, postguerra. La imagen mediática, cine, televisión, multimedia, etc. Estilos y público.


Consideraciones didácticas
Los contenidos curriculares deberán dar prioridad a lo regional integrando lo cotidiano para ir complejizándolo. Los alumnos tienen herramientas para construir líneas de tiempo. En este espacio curricular pueden trabajar desde esa idea, viendo de manera paralela y relacionada las vinculaciones entre las imágenes y los contextos en Latinoamérica y en Europa para reflexionar sobre continuidades y rupturas. La organización de los contenidos no debiera privilegiar una estructuración cronológica, al modo de la historia del arte tradicional, sino más bien establecer un entramado de redes sobre grandes rasgos de las cosmovisiones a lo largo de la historia. Diseñar actividades que contribuyan a reflexionar sobre los cambios filosóficos, económicos, sociales, culturales y sus diferentes manifestaciones en lo artístico y comunicacional como reflejo de una realidad.

Siendo objetivo de este espacio la formación de una conciencia crítica y analítica de los contextos donde están inmersos los propios alumnos debemos pensar en un docente creativo, no estanco, porque los contenidos se modifican constantemente. Es necesario entonces un docente dúctil, que tenga claro el perfil del alumno que debe formar, y que se proponga buscar una relación entre el planteo didáctico y las características sociales, culturales, afectivas, corporales de los alumnos, articulando con los saberes previos. En este sentido es importante rescatar las imágenes de la cultura adolescente (videojuegos, fanzines, clips musicales, animaciones, etc.) como objetos de análisis con una actitud de apertura estética.

Tradicionalmente la formación artística ha tendido a una separación entre el hacer y la teoría. El hacer se concentraba en el taller (de pintura, dibujo o composición musical) y la teoría - que no implicaba necesariamente reflexión - quedaba en las asignaturas del tipo de historia del arte. La propuesta de espacios curriculares como Imágenes y Contextos cobran sentido en tanto propenden a superar esa fragmentación vinculando la reflexión y la producción como dimensiones inseparables en la construcción de conocimiento. Las estrategias de enseñanza debieran propiciar esta articulación en una dialéctica que no divorcie ambos aspectos. Durante las clases será preciso desarrollar trabajos concretos de producción de imágenes contemplando su análisis, confrontación con otros y evaluación por el docente y los alumnos. La articulación con otros espacios específicos de la modalidad (Lenguajes Artísticos, Diseño) fortalecerá la formación técnica idónea propia del individuo que trabaja con imágenes, pudiendo separarlas para estudiarlas en sus diferentes sentidos, generando un alumno crítico y creativo.
Es importante lograr la articulación de este espacio curricular con otros que le sean afines (Historia, Geografía, Economía, Filosofía) potenciando las diferentes miradas sobre contenidos comunes.

Como parte del proceso de enseñanza - aprendizaje, los criterios que orienten la evaluación debieran resultar claros y explícitos, específicos respecto del contenido a enseñar, para que el alumno comprenda sus logros y sus dificultades.

Las estrategias para la selección de los contenidos estarán atravesadas por una adecuada formación docente, favoreciendo la vinculación de sus saberes específicos con el espacio curricular. Este tiene un carácter integrador y es innovador en la formación polimodal. Profesores de diversas disciplinas pueden abordarlo hablando desde sus propios saberes y vinculando su especialidad (profesor de arte, diseñador, comunicador social) a los objetivos y contenidos.