Buenos Aires, 16 de junio de 1996

Señor
Director de Página 12
Belgrano 671/77
1092 Buenos Aires.

Estimado señor Director:

Me permito solicitarle la publicación de estas líneas vinculadas con la difusión de un comentario mío sobre la Carta Pastoral de la Conferencia Episcopal Argentina del 27 de abril pasado, en la cual ese cuerpo formula reparos a su gestión durante la pasada dictadura militar.

En dichas declaraciones señalé que otros sectores de la sociedad habían adoptado posiciones igualmente complacientes, indicando entre ellos al Partido Comunista Argentino. A ese respecto recordé algunas consideraciones que me expresó en aquella época el entonces dirigente de dicha agrupación Fernando Nadra. Posteriormente el mismo Nadra me explicó que en realidad se había opuesto en el seno de su partido a tales continencias, pero no había logrado modificar la resoluciones de sus órganos directivos. Además las diferencias apuntadas se encuentran documentadas en los últimos libros y folletos del fallecido político, quien finalmente se alejó del movimiento al cual consagrara abnegadamente medio siglo de su vida.

Las palabras que manifesté haber escuchado de Fernando Nadra, como una prueba de mis afirmaciones, son exactas y nadie las ha desmentido. Pero como un deber de lealtad con mi recordado amigo, quiero dejar constancia que mi crítica a la política adoptada por el Partido Comunista en ese período de la vida argentina no implica desconocer las convicciones y sentimientos personales del extinto ni su lucha por la defensa de los perseguidos por el terrorismo de Estado. esa actitud, por otra parte, me consta de manera personal.

Saludo a usted atentamente,

Emilio F. Mignone