Lic. María del Carmen Villardefrancos
Alvarez
Lic. Enriqiue Suárez Zarabozo
Centro de Estudios y Desarrollo Profesional
en Ciencias de la Información
PROINFO. IDIDCT
Introducción:
El ambiente o escenario en que se ha desarrollado la actividad de
información y los profesionales de esta esfera se ha caracterizado
por actitudes tradicionales y reactivas. Esta propia actitud es la causa
de la caracterización que socialmente se le ha dado a os profesionales
de la información como simple custodios de almacenes de documentos.
Durante mucho tiempo esta situación dio respuesta en mayor
o menor medida a las expectativas de una comunidad usuaria no muy exigente
dado el propio desarrollo del medio y del avance científico y técnico
predominante.
Los cambios tecnológicos, el desarrollo social y la propia
evolución de la economía mundial trajeron aparejado un ambiente
de turbulencia, inestabilidad y competencia que obligó en primer
lugar a las organizaciones, empresas e instituciones de carácter
lucrativo a la búsqueda de soluciones ante tales fenómenos
sopena de perecer. Estas situaciones si bien se reflejaron de una u otra
manera en las instituciones de información, entiéndase bibliotecas,
centro de información, documentación, archivos, etc. No se
manifestaron con un carácter emergente hasta los momentos en que
esa situación se manifiesta con un carácter global.
En sentido general las instituciones a las que nos referimos han
desarrollado sus tareas y actividades sobre la base de un financiamiento
a partir de la asignación estatal u organizacional de recursos de
todo tipo.
Sin negar la importancia que desde el punto de vista educativo,
recreativo y formativo han tenido las acciones de algunos de estos centros
en el marco de la comunidad donde están enclavados o de apoyo a
la investigación, negocios y funcionamiento de las organizaciones
a las que han podido pertenecer, no es menos cierto que sus beneficios
no han sido siempre reconocidos por los usuarios a los que deben prestar
servicios. De aquí que como consecuencia de las crisis, cualquier
política de reducción presupuestaria y sus consecuencias
hayan encontrado en estas instituciones sus primeros blancos, las consecuencias
de tales medidas han sido el motor impulsor para la concientización
de la necesidad de un cambio con las situaciones que ya, desde hace algunos
decenios, comenzaron a afectar al resto de las organizaciones, podríamos
decir que esto constituye el fundamento de términos como mercado,
clientes, satisfacción de necesidades, estilos y herramientas gerenciales,
se hayan incorporado al argot de los profesionales de la información
cada vez con más fuerza. Lógicamente estos enfoques le permitieron
al mundo empresarial dar respuesta a las problemáticas del cambio
y la globalización de un conjunto de fenómenos que se han
impuesto en el mundo contemporáneo.
La conjugación de muchos de los factores citados con la importancia
trascendental que alcanza la información como recurso en estos tiempos
crearon condiciones para el renacer de una industria que aprovechando
las oportunidades ha devenido en una actividad con elevados dividendos
y que alcanza lugares cimeros dentro de la economía mundial, la
llamada Industria de la información. Esta industria se ha convertido
en proveedora de servicios y productos de alto valor añadido no
solo para las instituciones de información sino para sectores de
usuarios que reconocen los beneficios que les brinda y por tanto en un
fuerte competidor de aquellas instituciones informativas que continúan
manteniendo una línea tradicionales sus servicios. Por supuesto
las organizaciones que integran esta industria gestionan su actividad a
partir de los nuevos enfoques, métodos y herramientas del ámbito
generencial.
Desarrollo:
Dentro de todas las técnicas gerenciales que coexisten en la actualidad, han experimentado un mayor auge las relacionadas con:
· Marketing Actividad humana cuya finalidad radica en satisfacer
las necesidades y deseos del hombre por medio de los procesos de intercambio.
· Calidad Total Calidad significa que las necesidades
de los clientes se consideren y que todas las tareas se hagan bien desde
el primer momento, que la medida del éxito (ya sea en productos,
servicios, procesos o comportamiento) es el resultado. Es la gestión
que apoya a una organización donde todos sus miembros operan con
interés hacia un mejoramiento continuo y hacia las satisfacción
total de las necesidades de los clientes y con el objetivo de obtener resultados
de alto nivel de calidad en todos los aspectos de su trabajo personal o
de las operaciones de la organización.
· Benchmarking Es un proceso sistemático y continuo
para evaluar los productos, servicios y procesos de trabajo de las organizaciones
que son reconocidas como representantes de las mejores prácticas,
con el propósito de realizar mejoras institucionales.
· Reingeniería Consiste en el rediseño de todos
los procesos de la empresa u organización, en volver a empezar en
lugar de perfeccionar lo existente, entendiendo por proceso un conjunto
de actividades que coordinadas crean un valor para el cliente. Es un enfoque
para planear y controlar el cambio.
por sólo citar algunos, sin dejar de tener en cuenta que pudieran
ser prácticas empleadas en el mundo empresarial desde mucho antes
de su teorización, implantación como tal y generalización.
La aplicación de estas técnicas en las instituciones
de información transita por diferentes interpretaciones que pueden
darse de las mismas y en ocasiones sin tomar en consideración las
características de las instituciones que las aplican, en primer
lugar cabe señalar que su empleo en nuestras instituciones debe
pasar por un proceso más que de adopción de adaptación,
a la vez este proceso no puede ser semejante para todas las instituciones
por igual.
La orientación al cliente-usuario, principio rector en los
nuevos enfoques gerenciales se ve algo distorsionada por el slogan (que
aunque) incorporado en el credo de los profesionales de información
¨ brindamos servicios para la satisfacción de las necesidades
de nuestros usuarios ¨ no se corresponde con la verdadera dimensión
y alcance conceptual de la actual orientación.
El hecho de haber prevalecido en el marco de nuestra profesión
una verdadera orientación al producto más que al cliente
constituye la base de la existencia de esquemas mentales que deben ser
necesariamente transformados como premisa de cualquier transformación
o cambio de los estilos de gestión en la mayoría de las instituciones
de información en la actualidad.
La propia orientación al cliente-usuario que se traduce en
ofertas capaces de satisfaces necesidades y demandas con elevados niveles
de eficiencia y efectividad, obliga a las instituciones de información
a realizar los ajustes necesarios para dar respuestas a tales exigencias
de principios.
Si bien el enfoque de marketing procura que la institución
logre ser efectiva, la reingeniería a partir del rediseño
de los procesos se acometen con la finalidad de obtener resultados con
eficiencia, elevada calidad y con la mayor rapidez posible.
La calidad total y la reingeniería persiguen fines bastantes
semejantes, la diferencia fundamental radica en la profundidad y
alcance de sus objetivos. La primera debe procurar mejoras a partir de
lo existente en tanto la segunda plantea cambios radicales y profundos.
Por supuesto que las propias características y particularidades
de las instituciones de información conlleva desde nuestro punto
de vista no sólo a la adecuación de estos enfoques y técnicas
sino a la aplicación conjugada de los mismos.
Aunque del estudio de la literatura científica se podría
inferir la conceptualización de cada uno de ellos como fenómenos
aislados. Ilustrando nuestros puntos de vistas al respecto, mostramos un
gráfico que ilustra de forma plana la posible aplicación
conjugada de todos estos estilos gerenciales en un mismo espacio de tiempo:
Como puede apreciarse más que excluyentes estas técnicas
son complementarias. En el caso específico de nuestras instituciones,
la introducción de las mismas puede hacerse de forma gradual y parcial
tanto desde el punto de vista de la técnica como de la Institución,
es decir, en tanto se produzca en determinada área un proceso de
introducción de las ISO 9000, con el propósito de certificar
un producto determinado, puede estarse llevando a cabo un proceso gradual
de introducción de la Calidad Total a nivel institucional, así
mismo, en otras áreas podrán estarse realizando, a nivel
de pilotaje, acciones de Reingeniería.
La propia cultura del hacer, predominante en la generalidad de las
instituciones de información y los modelos mentales que prevalecen
en una parte considerable de los profesionales, no constituye un ambiente
del todo favorable para la asimilación de los nuevos estilos y técnicas
gerenciales al nivel que se requiere.
No es prudente confundir, al respecto, la familiaridad de los términos
de moda y su incorporación en la terminología de la profesión
con la comprensión y asimilación de los mismos.
En la misma medida que las nuevas exigencias y retos imponen la
implantación de nuevos estilos de gestión, su aplicación
demanda de la profesión el reconocimiento de nuevos escenarios y
la necesidad del cambio tanto de mentalidad, cultura del hacer, como en
las formas que tradicionalmente han funcionado las propias instituciones,
en correspondencia con las actuales condiciones.
Una cosa es la teoría y los enfoques gerenciales y otra algo
diferente es el manejo de las técnicas, ambas son fundamentales.
Hablar de nuevos estilos de gestión y de técnicas gerenciales
implica transformar el comportamiento de simple acatamiento al compromiso
con los cambios que conlleva la aplicación de las mismas.
La Calidad Total, el Marketing, la Reingeiería y el Benchmarking,
enmarcados dentro de las fronteras de la gerencia tienen sus propios límites
y por tanto sus particularidades. En cuanto a sus técnicas y herramientas
en sentido general no ofrecen singularidades en tanto aplican y utilizan
las conocidas y aplicadas por otras disciplinas.
Con independencia de que el Marketing traza el asimu a la institución,
la Calidad Total y la Reingeniería permitirán adecuar la
estructura organizacional a los nuevos requerimientos del mercado. En tanto
el Benchmarking posibilitará conocer que hacen otras Instituciones
homólogas para obtener resultados satisfactorios o qué les
impide obtenerlo. Esta información potencia a la institución
para la aplicación acertada del resto de las técnicas gerenciales.
Conclusiones:
1. El motor impulsor de los cambios en las filosofías gerenciales
está dado por el reconocimiento de la dinámica de las transformaciones
del entorno y la concientización de la urgencia de una solución
en el marco mental y organizacional en correspondencia con tal situación;
que genera la necesidad del compromiso de los empleados ante las exigencias
y retos de las nuevas condiciones y de los medios para lograrlo.
2. Los nuevos estilos gerenciales agrupan un conjunto de enfoques
y técnicas que abordan la solución de los problemas desde
diferentes ángulos pero con un mismo objetivo: orientación
al cliente-usuario, la calidad, eficiencia y efectividad.
La novedad de estos enfoques, lo emergente de la situación
y la necesidad de prevalecer en un entorno cambiante y competitivo conduce
a que la aplicación de estos estilos gerenciales más que
excluyentes sea complementaria