La
participación de Cobreloa no fue ni espectacular, ni fantástica.
Pero de alguna forma Cobreloa se reencontró con la Copa Libertadores
y dejó la sensación de haber representado de buena
forma a nuestro país.
En
la primera fase los rivales fueron Boca Juniors, Deportivo Cali
y Oriente Petrolero. Los argentinos aparecían como los grandes
favoritos para quedarse con el grupo y en segundo lugar aparecían
los colombianos que habían formado un equipo millonario,
con el objetivo de ganar la Copa Libertadores.
Sin
embargo, en el debut Cobreloa confirmó que no sería
un rival fácil para ninguno: un triunfo de 2-1 en Colombia,
comenzó a cimentar la ilusión de que la Copa 2001
no sería un mal recuerdo. Después vendría el
partido con Boca, en Calama, donde Cobreloa tuvo todo para ganar,
pero finalmente fueron los argentinos los que se quedaron con el
triunfo.
Después,
la emoción: los triunfos sobre Deportivo Cali y Oriente Petrolero
en Calama, en los minutos finales. Entremedio, una buena presentación
en Argentina, donde Boca fue el justo vencedor.
Así
se llegó a la última jornada. Cobreloa necesitaba
de un empate en Bolivia para clasificar. Y así fue, en un
emocionante partido con Oriente Petrolero, donde incluso se habló
de incentivos por parte de los colombianos, Cobreloa consiguió
su paso a octavos de final. Ahí Cobreloa tuvo que enfrentarse
con la Confederación, para conservar su localía en
Calama. Se aceptó, con un pero: el encuentro no podía
ser en el tradicional horario de las 16 horas.
En
esa fase se encontró con Rosario Central, un cuadro que a
estas alturas puede considerarse como el gran verdugo de Cobreloa.
Ya había eliminado en dos ocasiones a Cobreloa por la Conmebol.
El
primer partido marcó la pauta. Una derrota en casa por 2-3,
cuando Cobreloa merecía haber ganado el partido. En la revancha
Cobreloa consiguió un empate y terminó acorralando
a los argentinos. Pero no fue suficiente.
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