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Si usted amigo cibernauta, ha estado buscando a Dios a través de terceras personas, desista.  Él no esta alli; esta dentro de usted mismo.  Lo que sucede es que Dios respeta su elección y deja que usted llegue a Él por sus propios medios y voluntad.   Esa es la escencia del amor:  El darse cuenta de la necesidad que uno tiene de compartir la vida con un amigo fiel, el buscar ese amigo por voluntad propia, el llegar a ese amigo con sinceridad y humildad en el corazón.  Con verdaderas ganas de aceptar su amistad, descansar las cargas y comenzar una nueva relación no solo con Dios sino con uno mismo y los demás que le rodean.

Sin embargo, esa relación debe tener un comienzo basado en la manifestación de su voluntad de comenzar con Dios un nuevo nivel de contacto personal.  Usted necesita manifestarle a Él todo esto de una forma clara y precisa.  Dondequiera que usted se encuentre, a la hora que lea usted estas líneas, entregue su alma al Señor quien la creó diciendo y deseando en su corazón lo siguiente:

"Padre, he comprendido que necesito tenerte siempre conmigo, gozar de tu presencia y de tu amistad.  Perdona mi vida pasada; cámbiame y dame vida nueva.  Haz de mí un nuevo ser.  Te acepto dentro de mi corazón y manifiesto a Jesús, el hijo de Dios, como mi único Señor y el único intercesor entre Tú y yo.   Escríbe mi nombre en el libro de la vida eterna y cuentame ahora entre los tuyos." (Cierre sus ojos y diga con su voz y con su alma: A M E N !!! ).

Dios ha creado en usted nueva criatura.  Todas las cosas viejas le son pasadas. De ahora en adelante, siéntese a ver como el Señor cambiará su vida.  Mantener esta nueva amistad tiene una sola condición: séale fiel.  Para hablar con su creador, hágalo solamente a través de su hijo Jesús.  Pídale las cosas en su nombre.   No hay necesidad de otros intercesores; no hacen falta.  Su nuevo amigo es el mejor intercesor.  Como Él no hay otro.  Hable con Él, cuéntele; descarge en su nuevo amigo todas sus cargas.  Y por encima de todo, mantenga su relación con Él a nivel personal.  No busque a su nuevo amigo en una imagen; Él no puede estar alli y Él es mucho mas que eso.  Ademas, recuerde que no fue alli donde lo encontró.   Lo encontró dentro de usted y es alli donde siempre estará. 

Por otro lado; su amigo, sabiendo que usted hoy le aceptaría, le dejó material de apoyo para que usted aprenda más sobre Él.  Ese material de apoyo es su biblia.   Material escrito que Dios puso en sus manos como un manual para que usted desarrolle su vida social y espiritual de acuerdo a Su voluntad.  Su biblia es su manual personal. Pídale a su nuevo amigo luz y entendimiento para leerla y comprenderla. Le aseguro mi querido amigo, que el trabajo mas fácil y placentero que Dios hará con usted es precisamente ese; darle la luz y el entendimiento para que usted comprenda su palabra.  Yo creo que cosas mucho mas difíciles habrá hecho Dios ya con usted; eso sería lo mas fácil.  El Señor abrirá su entendimiento, se lo aseguro.  Tóme esto como un regalo "personal" de su nuevo amigo.  Puede que su nuevo amigo "utilice" a otros para que usted aprenda su palabra, pero recuerde: La palabra no es de ellos, es de Dios. 

No vea a los hombres que le traen la palabra mas que lo que en realidad son: CARTEROS.  Ellos solo se encargan de traer el mensaje que Dios les da para que se lo lleven a usted.  Eso es todo.  Ellos no redactan mensajes, no los revisan, ni siquiera saben que es lo que contienen.  Ellos solo los reparten.   Por eso, no vea en ellos ni en nadie mas a un "traductor de la palabra". Su propio corazón es el mejor traductor.  Su corazón es la tierra y la palabra la semilla que El Señor siembra allí para que crezca y floresca.  En este proceso no se necesita de nadie más; solo la tierra, la semilla y el sembrador; su corazón, la palabra y Dios.  Hay que tener cuidado de los tantos carteros que redactan sus propias cartas. ¿Como?  Escudriñe todos los mensajes, juzgue todo lo que dicen, retenga lo que considere bueno, deseche lo malo.

Por último, mire a su alrededor.  Habemos otros que como usted tambien tenemos una relación personal con Dios.  Nuestras relaciones con Él tambien son individuales.  Cuando nos juntamos todos en un mismo lugar en el nombre de Jesús, sentimos su presencia porque ese es un acuerdo que Él tiene con nosotros. Cuando nos unimos mas de tres en su nombre, Él está alli; asi que para esto es que nosotros, sus amigos, nos reunimos todos a una hora y en un sitio determinado. Para estar con Él, a alabarle a Él, a hablar con Él, y tambien a esperar al cartero!

Ahora que usted es su nuevo amigo, y que su nombre esta escrito en el libro de los suyos, tengalo por seguro que su nuevo amigo le va a enviar mucho pero mucho correo asi que mi querido amigo; búsquese su cartero pronto.  Nosotros tenemos muy buenos carteros.  Le esperamos.


Diseñado por: Marcos Sánchez Urquiola. Copyright © 1998
Última Actualización: 26/08/1998 11:09 PM

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